Reseña: Cosas que brillan cuando están rotas

COSAS QUE BRILLAN 

CUANDO ESTÁN ROTAS

-Nuria Labari- 

El 11 de marzo de 2004 Madrid sufrió el peor ataque terrorista de su historia. Entonces yo trabajaba como periodista. Tenía 24 años. Toda la información que aparece en esta novela es real. Y sin embargo se trata de un estricto ejercicio de ficción. Un viaje de la imaginación hacia una realidad movediza y llena de fisuras.

Cosas que brillan cuando están rotas
Nuria Labari
Editorial: Círculo de tiza
Precio: 22,00 euros. 

-OPINIÓN PERSONAL-

En esta obra se nos relatan tres vidas simultáneamente; la de una familia (él y ella) y su hija. Todos los personajes tienen sus problemas, sus inquietudes y sus virtudes o defectos. Aunque, realmente, Cosas que brillan cuando están rotas se centra en el 11-M. Narrado desde el punto de vida de una periodista que estaba en primera línea. Nuria Labari lo vivió, lo sufrió y le da voz a nuestra protagonista. Es muy interesante, ya que llegamos a conocer el testimonio de una persona que lo vivió en primera persona. 

Antes de comenzar, quiero decir que me parece muy valiente escribir esta novela. Puede afectar a muchas personas y tratarlo de la manera que la autora lo ha hecho, me parece excepcional. Toca la fibra, toca los sentimientos más profundos que una persona puede tener... Pero esto es la vida: hay personas buenas y hay otras que no lo son tanto. 

Es mentira: la realidad no supera la ficción. Necesitamos la ficción para superar la realidad. 

Los personajes me han parecido bastante acertados y la manera de diferenciarlos me ha parecido perfecta. Eva, nuestra protagonista y periodista, vive todos los atentados en primera persona mientras se encuentra sola en Madrid, ya que tras una crisis de pareja su marido y su hija se van a Alemania. 
Esto ayuda a individualizar las tramas y centrarnos, realmente, en lo importante: los atentados de Madrid. 

Centrándonos en la trama de Eva, tengo que decir que me ha impactado muchísimo. Cuando ocurrieron los atentados yo era muy pequeño y no sabía qué había pasado en realidad. 
Aunque parezca que Cosas que brillan cuando están rotas busca la lágrima fácil no creo que sea así. Trata el tema desde el interior, desarrollando temas como el dolor y la esperanza. Sí, sí que nos duele. Sí que me ha dolido. Pero entiendo que es necesario. Hablar de estos temas ayuda a la superación. Si dejamos el dolor guardado se va a hacer más y más grande. 

Por otro lado, la historia de padre e hija también me ha gustado mucho. Aunque, si tengo que decir la verdad, me ha sobrado muchas veces. Me interesaba Eva y quería entender qué había pasado en Madrid. 
Eric y Clara sobraban, aunque he entendido perfectamente su función dentro de la novela. 

En esta obra no hay nada por casualidad. La autora no da puntada sin hilo y sabe que cada aspecto y acción dentro del libro tiene una repercusión en la vida de los personajes. Además, me ha interesado mucho conocer cuál era la visión del 11-M fuera de España. 

Solo una cosa es cierta. Tú y yo seguimos vivos. Irresponsablemente vivos. 

Para ir finalizando, me gustaría destacar lo bien desarrollados que están los sentimientos de los personajes. Personalmente, me he sentido identificado con Clara. Sus reflexiones, su falta de compasión y de dolor, el rechazo a su familia y su "pasotismo" me han parecido bastante oportuno. Siento que toda madre se sentirá identificada con Eva y todo hombre podría hacerlo con Eric. 

La pluma es dura, es negra, es urbana. No os esperéis una literatura dulce ni simpática. Se relatan muchas escenas duras y lo único que podemos encontrar en un estilo que la acompañe. 

¿Me ha sorprendido? Sí. 

¿Me ha dolido? También.

¿Lo he disfrutado? Todo lo que se puede disfrutar el dolor. 

-4/5-